Bruselas, 24.10.2023

COM(2023) 653 final

INFORME DE LA COMISIÓN AL PARLAMENTO EUROPEO Y AL CONSEJO

Informe de situación de la Acción por el Clima de la UE de 2023

{SWD(2023) 338 final} - {SWD(2023) 339 final}


1TENDENCIAS DE LAS EMISIONES Y AVANCES EN LA ACCIÓN POR EL CLIMA

Emisiones de gases de efecto invernadero y compromisos internacionales de la UE

En marzo de 2023, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (GIECC) confirmó que el calentamiento global, inducido por las emisiones antropogénicas de gases de efecto invernadero (GEI), está aumentando la frecuencia y la gravedad de los fenómenos climáticos y meteorológicos extremos, lo que da lugar a efectos generalizados y adversos para las personas y la naturaleza en todo el mundo. El aumento del calentamiento intensificará estos efectos, por lo que es necesaria una acción mundial urgente por el clima para limitar el calentamiento global y adaptarse a sus efectos. Las emisiones mundiales de GEI deben disminuir en un 43 % y un 84 % con respecto a los niveles de 2019 para 2030 y 2050 respectivamente, mientras que a principios de la década de 2050 se deben alcanzar las cero emisiones netas mundiales de CO2 si queremos limitar el aumento de la temperatura a 1,5° C con un rebasamiento nulo o reducido. La reducción de las emisiones de GEI tiene muchos beneficios colaterales, en particular para la calidad del aire, la salud, la biodiversidad y la seguridad energética 1 .

El calentamiento en Europa ha sido el doble de la media mundial desde la década de 1980, lo cual ha tenido repercusiones de gran alcance en el tejido socioeconómico y los ecosistemas de la región 2 . En el año 2022 continuaron los efectos devastadores asociados al calentamiento del clima, y los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más frecuentes. Las olas de calor de finales de primavera y del verano, en las que se alcanzaron las temperaturas más altas jamás registradas en muchos lugares, dieron lugar a un número récord de días con un fuerte estrés térmico, lo que produjo una mortalidad adicional de más de 61 000 personas en toda Europa 3 . A las condiciones cálidas y secas de la primavera y el verano, que provocaron sequías en la mayor parte de Europa y alimentaron numerosos incendios forestales de gran envergadura, siguieron fuertes precipitaciones e intensas inundaciones en otoño, lo que causó docenas de víctimas mortales 4 . En general, el verano de 2022 fue el más cálido jamás registrado en Europa 5 . En 2023 se han seguido batiendo récords de temperatura, lo cual confirma el ritmo extraordinario del cambio climático. Julio fue el mes más cálido registrado, con temperaturas mundiales 1,5° C más cálidas que la media preindustrial. El aumento de las temperaturas y de la frecuencia de los fenómenos extremos contribuyó a numerosos incendios forestales que, a finales de julio de 2023, habían afectado a más de 182 000 hectáreas en toda la UE, un 40 % por encima de la media de 2003-2022 6 , mientras que otras partes de Europa se vieron afectadas por inundaciones sin precedentes 7 .

En 2022, las emisiones mundiales volvieron a la tendencia al alza que presentaban antes de la pandemia, alcanzando los 53 800 millones de toneladas equivalentes de CO2 (CO2eq), muy por encima de las emisiones de 2019. Los datos preliminares del JRC 8 muestran que las emisiones mundiales de GEI aumentaron un 1,4 % en 2022 en comparación con los niveles de 2021, frente a un crecimiento del PIB mundial del 3,4 % durante el mismo período, ya que la economía mundial siguió repuntando tras la pandemia. El transporte fue la principal causa de aumento de las emisiones de GEI (+ 4,7 % o 361 Mt CO2eq), aunque todavía se encuentra por debajo del nivel previo a la pandemia, seguido de la producción de combustible 9 (+ 2,6 % o 157 Mt CO2 eq) y la energía (+ 0,9 % o 136 Mt CO2eq). Entre los países responsables de más emisiones, los aumentos más significativos se han producido en Indonesia (+ 10 % o 113 Mt CO2eq) e India (+ 5 % o 189 Mt CO2eq), mientras que China presentó un aumento limitado (+ 0,3 % o 52 Mt CO2eq).

En la UE, los datos provisionales 10 correspondientes a 2022 muestran que las emisiones totales de GEI [excluidos el uso de la tierra, el cambio de uso de la tierra y la silvicultura (UTCUTS) y la aviación internacional] disminuyeron un 2,4 % en comparación con 2021, continuando la tendencia descendente de los últimos treinta años, mientras que el PIB de la UE creció un 3,5 % en 2022 (gráfico 1.a). Las emisiones cubiertas por el régimen de comercio de derechos de emisión de la UE (RCDE UE) disminuyeron un 0,2 %, y las emisiones no incluidas en el RCDE, un 2,9 %.

Gráfico 1: Emisiones de GEI de la UE (excluidos el uso de la tierra, el cambio de uso de la tierra y la silvicultura) y por sectores 11  

Gráfico 1.a

Gráfico 1.b

Los acontecimientos excepcionales de los últimos tres a cuatro años han hecho más compleja la evaluación de las tendencias de las emisiones de GEI y siguen afectando a las emisiones de 2022. Por lo tanto, en aras de una mayor claridad, el presente informe evalúa la variación interanual de las emisiones y las compara con el nivel anterior a la pandemia. Los confinamientos y las restricciones a causa de la COVID-19 dieron lugar a una caída sin precedentes pero temporal de las emisiones de GEI del 8 % en 2020. En 2021, la recuperación económica afectó de manera diferente a regiones y sectores. Algunos sectores, como el del transporte y las emisiones relacionadas con los viajes, no se recuperaron completamente hasta 2022. La crisis energética que comenzó en 2021 continuó en 2022, exacerbada por la invasión no provocada e injustificada de Ucrania por parte de Rusia, que llevó a los precios de la energía a registrar máximos, en particular los del gas. Además, la disminución del nivel de producción de energía nuclear 12 y la baja producción de energía hidráulica 13 han dado lugar a un aumento del uso de carbón y lignito para la generación de electricidad, que ha superado el nivel registrado en 2021. Los elevados precios de la energía también dieron pie a medidas para reducir la demanda de energía tanto industrial como doméstica.

Las emisiones de la UE por sector muestran estas variaciones (gráfico 1.b). Se espera que las emisiones de la energía y el transporte aumenten en 2022, aunque se mantengan por debajo de los niveles de 2019 anteriores a la pandemia, mientras que se esperan reducciones significativas de las emisiones en los edificios y la industria, principalmente debido al aumento continuo de los precios de la energía. A pesar del ligero descenso registrado en 2022, las emisiones de la agricultura se mantienen prácticamente al mismo nivel que hace diez años.

Los datos provisionales de 2022 relativos a las absorciones netas de GEI procedentes del sector del uso de la tierra, el cambio de uso de la tierra y la silvicultura (UTCUTS) parecen indicar un cambio en su reciente tendencia a la baja, con un aumento previsto de los sumideros de carbono del 6 % en comparación con 2021, aunque las emisiones aproximadas están todavía sujetas a revisiones exhaustivas. Por consiguiente, en 2022 las emisiones netas totales de GEI (incluido el sector UTCUTS) disminuyeron un 3,0 % anual, lo que supone una reducción del 32,5 % con respecto al nivel de 1990.

En la UE, las emisiones verificadas de los operadores de aeronaves aumentaron significativamente, un 75 % en comparación con 2021, a medida que la industria se recupera de los bajos niveles de actividad durante la pandemia de COVID-19.

Hacia el objetivo de neutralidad climática

Además de evaluar los avances realizados en la política climática en virtud del Reglamento sobre la gobernanza 14 , el presente informe evalúa por primera vez este año los avances en el marco de la Legislación Europea sobre el Clima 15 , incluidos los avances colectivos realizados por los Estados miembros hacia el objetivo de la UE de lograr la neutralidad climática para 2050 16 . El informe examina los progresos en varios aspectos y a partir de varias fuentes, y tiene en cuenta la complejidad inherente a las múltiples vías posibles para lograr una economía resiliente y de cero emisiones netas.

En general, los datos provisionales de 2022 muestran que las emisiones netas de GEI de la UE (es decir, incluyendo el sector UTCUTS y excluyendo el transporte internacional) están en descenso constante, en consonancia con la trayectoria lineal hacia la consecución del objetivo de reducción de GEI de la UE para 2030 (es decir, – 55 %) y el objetivo de neutralidad climática de la UE para 2050 17 . Sin embargo, debe acelerarse el ritmo de reducción de las emisiones hasta casi triplicar la reducción media anual que se ha alcanzado durante la última década (véase el gráfico 2.a). En relación con anteriores esfuerzos de mitigación, las reducciones más significativas de las emisiones deben producirse en los edificios y el transporte, donde el ritmo de descarbonización es lento o incluso avanza en la dirección opuesta. Al mismo tiempo, la acción en el sector UTCUTS es esencial para lograr un impulso significativo en las absorciones de carbono. Aunque la consecución de las reducciones de emisiones que se exigen a la agricultura parece factible si se consideran los progresos de las tres últimas décadas, la falta de avances sustanciales en los últimos años suscita preocupación, por lo que es necesario un cambio de ritmo (gráfico 3.b).

Aunque estas reducciones de emisiones son considerables, tienen precedentes. En los dos años previos a la pandemia, las emisiones se redujeron una media anual de 120 millones de toneladas equivalentes CO2 debido a los avances en la eficiencia energética y el rápido despliegue de las energías renovables. En 2022, todos los agentes de la UE, incluida la industria de gran consumo de energía, redujeron su demanda de energía con respecto a los niveles anteriores a la pandemia, lo que supuso un ahorro de más del 18 % del gas en comparación con los cinco años anteriores 18 .

Gráfico 2: Emisiones netas de GEI de la UE, objetivos y previsiones agregadas de los Estados miembros 19

Gráfico 2.a

Gráfico 2.b